Para muchas personas, la Semana Santa, además de significar días de descanso y conexión espiritual, también representa un momento para compartir con nuestros seres más cercanos. La playa, la piscina, los ríos, la montaña, son algunos de los lugares más frecuentados en estas épocas, tomar un poco de sol, darse un baño con agua salada o dulce, practicar senderismo o deportes que nos permitan estar en contacto con la naturaleza, resultan ser los mejores planes, por lo tanto, es uno de los períodos en donde nuestra piel suele estar expuesta por muchas horas a las radiaciones solares.
Con el fin de cumplir nuestra promesa de cuidar de tu piel, hoy te regalamos algunos consejos que te ayudarán a prepararla y cuidarla, antes, durante y después de estos días tan importantes para el descanso de nuestro cuerpo, con el fin de lucir una piel reluciente, descansada y cuidada al volver a tu rutina laboral.
¿CÓMO PODEMOS PREPARAR NUESTRA PIEL?
La piel es el órgano más grande de nuestro cuerpo y el encargado de protegernos del medio ambiente, sin embargo, para poder desempeñar su función correctamente debe estar cuidada y protegida.
Paso 1:
Con el fin de cuidarla, la limpieza es un punto clave, por lo tanto, debemos mantenerla limpia. Si realizas ejercicios constantemente, asegúrate de llevar contigo una toalla limpia para retirar el sudor al terminar tu rutina, evita permanecer con el sudor por más de una hora luego de tu entrenamiento, ya que las bacterias del sudor podrían interactuar con tus poros, obstruirlos y como consecuencia, la barrera protectora de tu piel se debilita y síntomas como el acné, la excesiva producción de sebo o la hipersensibilidad se manifestarán.
Paso 2:
También, mantener las células buenas activas le permitirá a tu piel cumplir mejor con su función barrera, para ello, eliminar las células muertas mediante una exfoliación gentil fortalecerá tu piel permitiendo su correcto desempeño. Es importante que los productos que uses para esta exfoliación no sean abrasivos, el Gel Exfoliante Facial Detox para pieles grasas y el Gel Exfoliante Facial de Rosas para pieles secas están formulados para ofrecerte una exfoliación gentil pero efectiva, manteniendo el equilibrio y buen funcionamiento de las células de tu piel.
Es muy importante que esta exfoliación no la realices durante tu período de exposición al sol, ya que las células se regeneran luego de la misma, y la exposición al sol durante el período de regeneración podría ser contraproducente, por eso, es recomendable realizarla al menos 3 o 4 días antes de la exposición solar.
Paso 3:
La hidratación de tu piel, aunque parezca un paso sencillo ¡es importante! Una piel deshidratada muestra síntomas como hipersensibilidad, resequedad, descamación, etc., y como consecuencia, no es de sorprenderse si algún producto de tu rutina no cumple con su promesa de venta, no porque el producto no cumpla su función, si no porque nuestra piel no está en condiciones para retenerlo adecuadamente.
Sabemos que uno de los problemas más frecuentes del trópico es la humedad, y que al aplicar cremas hidratantes o humectantes, nuestra piel tiende a sentirse pesada y en ocasiones, hasta suele transpirar, sin embargo, existen productos como el Gel Hidratante de Ácido Hialurónico cuya fórmula ligera permite la correcta hidratación de nuestra piel sin dejar esa sensación de pesadez en nuestra cara. Además, su fórmula libre de aceites y con una adecuada concentración de ácido hialurónico hace de este producto una perfecta opción, tanto para las pieles grasas como para las pieles secas.